sábado, 29 de marzo de 2008

Quiero decirte Javier


Tengo que reconocer que me empecé a interesar sobre tus virtudes actorales , a partir de “Los lunes al sol” con aquel extraordinario personaje de Santa, ese desocupado que deambula en los bares junto con sus amigos, me pareció conmovedor. Con tu labor, en “No country for old men”, alcanzaste un punto máximo en tu versatilidad interpretativa, la construcción que lograste del psicópata de Antón Chirgurh es memorable. Hacia mucho, que no veía una mirada tan perturbadora e inquietante como la tuya, logras transmitir toda la impunidad con que se mueve tu personaje.
Mereces sin dudas, un lugar entre los grandes; admiro tu enorme imagen de antidivo, cuando te burlas de los que quieren hacerte aparecer, como un Antonio Banderas , pero con talento. Sé que mi opinión no te llegará, pero quiero decirte Javier: eres uno de los mejores actores de este planeta.


*trailer


jueves, 20 de marzo de 2008

Cotidiano


Cada día que pasa


Sin excepción, casi por naturaleza o desatino,
todos los días, a la mañana, temprano,
ando por este camino. Llego tarde al trabajo y con
alegría, cuando
es necesario llegar más temprano
y con indignación o repugnancia o sed
de venganza o rabia. Todo esto
no me martiriza ni me apena, aunque parezca
lo contrario y tenga olor a traición; sé muy bien,
con toda impaciencia, que el ocio
llegará algún día con la revolución. Y que ni una cosa
ni la otra vienen de la tristeza o de la impotencia.

Voy cansado, es cierto, harto como todo el mundo que se precie,
o con desaliento; pero nunca falta
alguna cosa, un olor,
una risa que me devuelva,
para valer la pena; recién entonces empiezo a convencerme;
calles sucias y bocinas y el tráfico
alucinado y dormido todavía; viejos conocidos,
como el destino
o la bruma de la ciudad. Y
el mal semblante; la desconfianza
en los ojos, en los grandes ojos de la gente
hechos para volar. Manos enrarecidas
que rodean
la calle sitiando su respiración. Dominados
del mundo; empleadas
tersas y vulgares bajando
de coches lujosos de los dueños
de otras empleadas, y así sucesivamente.

Francisco Urondo



sábado, 15 de marzo de 2008

Afrancesados

Michel Houellebecq y Alan Pauls leen poema sobre hirondelles

Todd en busca de Bob


El cineasta Todd Haynes no intenta reconstruir la vida y la obra de los artistas de rock, a través de un registro absolutamente veraz y testimonial, sino por el contrario, intenta dialogar con el universo que los ha perseguido- o los persigue- en su historia. Tal como lo demostró con su falso documental, Velvet Goldmine, y su exploración del glam.rock de los 70, para él no era necesario que los personajes tuvieran el nombre de David Bowie, Lou Reed, Brian Eno y Cia ; el principal objetivo era recrear el clima y el espíritu de la época y en especial, intentar escribir al rock dentro una página de la historia del arte.
Haynes arremete en esta ocasión, con la vida de Bob Dylan, en su último largometraje, I`m Not There, “descuartizando” la figura del músico norteamericano, interpretado por diferentes actores. Así vemos a Cristian Bale, Heath Leadger, y Cate Blanchet ¡ Si leyó bien ! una actriz interpreta a Dylan, aproximándose al mundo “dylaniano”.
El poeta, el rebelde, el músico de Folk., el místico, el cowboy, todos son y no son Dylan, por un instante. Los personajes se tropiezan y contradicen, como si la aparición de uno fuese motivo de asesinato para el otro. Haynes, insiste en recrear universos para explicar que un músico de rock, también se construye dialogando con otras formas artísticas, quizás la muestra más contundente de esto, es el personaje que interpreta a Allen Ginsberg, uno de los padres de la generación Beat.
Al finalizar la película, nos queda flotando la pregunta ¿Dónde estás Bob? Como si Haynes nos diera la pauta de que un buen artista no tiene origen, y mucho menos fin.

I'm Not There Trailer

Testigo


" En mi época, llegué a presenciar las secuelas de quizás unas mil muertes sospechosas, las mayorías de las cuales resultaron ser suicidios o accidentes, o simplemente, gente abandonada. Así que he visto todas las clases: saltarines, mutilados, sumergidos con un peso, zambullidos, desangrados, flotadores, baleados, reventados. He visto los cadáveres muertos a golpes de bebés de un año. Los de nonagenarias violadas por pandillas. He visto cadáveres abandonados por tanto tiempo después de su muerte que la única posibilidad de deducir la fecha del deceso era el tamaño de los gusanos. Pero de todos los cuerpos que he visto, ninguno se me ha quedado grabado en mis entrañas como el cadáver de Jennifer Rockwell. "

Martin Amis
El tren de la noche (fragmento)

domingo, 9 de marzo de 2008

León que no es Gieco


En la página 232, de “Literatura y Revolución”, de León Trotsky, encontré un fragmento, que me gustaría hacerles conocer _ si todavía no lo han hecho_ a algunos amigos y camaradas de la izquierda, que todavía plantean y hablan de la necesidad de un arte con compromiso social. Sé que a veces, cuando leen un libro que no hace referencia a las luchas de la clase obrera mundial, o miran un filme que no ha dirigido Kean Loach, lo descartan, como pura basura burguesa:

“El arte, como la ciencia, no sólo no buscan dirección, sino que, por su propia naturaleza, no la pueden soportar. La creación artística obedece a sus propias leyes, aún cuando se pone conscientemente al servicio de un movimiento social. Una creación espiritual auténtica es incompatible con la mentira y la hipocresía, y el espíritu acomodaticio. El arte puede ser el aliado de la revolución, en la medida en que sea fiel a sí mismo.”

Consejo

“Aprovecho / para decirles / como por azar / que el único / gran problema / del cine / me parece que es / dónde y por qué / comenzar un plano / y dónde / y por qué / terminarlo.”

Jean Luc Godard en " Historia/s de Cine

sábado, 1 de marzo de 2008

Las canciones son amores


El viernes por la noche, en casa de un amigo, escuché un par de canciones de Franco Simone, Camilo Sesto y Gian Franco Pagliaro. Si, lo hice. Lo acepto, tengo que reconocer que me gustaron. Sonaban bonito, entonados, agradables y con buen acompañamiento instrumental.
Ahora, cualquier idiota desafinado, con el apoyo de la industria discográfica, triunfa y provoca el estallido y la locura femenina. Cantan sin sentimientos, y no hay una mínima aproximación a un hecho artístico, en sus interpretaciones.
Es curioso, pero a veces, uno se descubre en situaciones impensadas; me he convertido en un nostálgico de las canciones románticas de los 70. No tengo arrepentimiento alguno; estoy decidido a reivindicarlo ante cualquier foro. Si alguien viene a discutírmelo, pienso decirle: “Ahora gracias a ellos, creo en el amor. He vuelto”.

Sentido


" Al revisar los textos de geometría se preguntaba si verdaderamente valía la pena saber leer, y de esos libros guardó una frase larga que soltaba en los momentos de mal humor: "La hipotenusa es el lado opuesto al ángulo recto en un triángulo rectángulo". Frase que más tarde causaba estupor entre los habitantes de El Idilio, y la recibían como un trabalenguas absurdo o una abjuración incontestable. "

"Un viejo que leía novelas de amor" de Luis Sepúlveda